¡¡Hola chic@s, muy buenos días!!
Creo que ya lo tengo, que lo he descubierto =)
Me parece que ya he encontrado qué es lo más importante de un interiorismo para mí (y me siento como si hubiera descubierto algo muy grande; como cuando eres pequeñ@ y descubres... no sé, que con un taburete ya llegas hasta el chocolate o que no por tener un berrinche vas a conseguir lo que quieras y, por lo tanto, dejas de hacer el ridículo en el acto)
Me he dado cuenta de que lo realmente me importa de un lugar
es que ese espacio tenga la posibilidad de reinventarse =)
No me importa tanto el estilo que defienda como el hecho de que exista la opción de ponerlo todo patas arriba y darle un nuevo registro.
Lo mejor, y supongo que por eso me siento tan feliz, es que he comprendido que en la 'reinvención' está la solución para casi todo (en serio, voy como alucinada, pararía a la gente por la calle y le diría '¿pero ya se ha dado usted cuenta de que la solución está en reinventarse?'. Sobra decir que no lo hago, porque aunque a algunos les pueda parecer incluso divertida la cara de flipe que he adoptado desde mi descubrimiento; imagino que si voy, los cojo del brazo y los zarandeo diciendo '¡reinvención, reinvención!' seguro que gracia, lo que se dice gracia, les haría más bien poca...)
En nosotr@s mism@s:
Tod@s podemos -y debemos- cometer errores, claro que sí. Yo por ejemplo, de jovencita (mil o mil quinientos años atrás) me emperré en que quería tener el pelo rizado.
Convencí a mi madre (técnica del agobio/hastío) y me hice una permanente. El rizo era majo y yo era feliz...
hasta que me hicieron una foto y comprendí que la reinvención era necesaria además de muy urgente =)
En la cocina:
Nos ha pasado a tod@s. De repente un día te levantas y ves clarísimo que el futuro de la cocina mediterránea pasa por combinar las legumbres con el queso.
Te pones a ello: hierves las legumbres y mientras tanto escribes un post, te entretienes, te llama una amiga por teléfono a la que escuchas embelesada cuando te explica con todo lujo de detalles el magnífico lugar en el que ha estado el último fin de semana... y cuando vas a ver qué tal les va a las legumbres, te encuentras con toda una masa deshecha que amenaza con cobrar vida propia.
Te pones a ello: hierves las legumbres y mientras tanto escribes un post, te entretienes, te llama una amiga por teléfono a la que escuchas embelesada cuando te explica con todo lujo de detalles el magnífico lugar en el que ha estado el último fin de semana... y cuando vas a ver qué tal les va a las legumbres, te encuentras con toda una masa deshecha que amenaza con cobrar vida propia.
¿Qué haces? Pues no te queda otra... 'reinvención': te olvidas del queso, coges el túrmix, lo trituras todo hasta conseguir textura de crema fina, le pones algún 'divertimento' y lo llevas a la mesa con todo el descaro que seas capaz de encontrar en tus reservas...
para comprobar sorprendida que todos repiten y te dicen lo estupenda que te ha quedado esa crema
(Y además añaden: 'No como la del otro día, que parecía que le faltaba unnosequéounalgo' esa por la que tú habías estado sufriendo atada a los fogones confitando cebolla, con todos los sentidos puestos y removiendo sin parar... En fin)
En la vida:
Vivir consiste básicamente en caminar, tropezar, caer y volver a levantarse; pero lo mejor de todo, lo que hace que la vida merezca la pena ser vivida, es que cada vez que nos caemos
tenemos la oportunidad de reinventarnos levantándonos de una manera totalmente nueva =)
¿No os dais cuenta? Podemos ser alguien totalmente distinto a cada paso; alguien que ofrece soluciones diferentes a partir de cada tropiezo. Y es precisamente por ello que debemos perder el miedo a equivocarnos porque con cada error, conseguimos otra oportunidad de cambio.
Y lo mismo ocurre -cómo no- en decoración: después de ver muchas casas, pisos, espacios y locales varios, me he dado cuenta de que siempre me atraen aquellos que nunca se cierran a una segunda oportunidad; los que nunca pierden la categoría de lienzo en blanco, siempre dispuestos a admitir un cambio, a contener un trozo de nuestro pasado o a recibir un hobby nuevo.
Esta casa de hoy me parece un estupendo ejemplo de ello...
No me riñáis, ya sé que os debo todas las visitas del mundo y que tengo muchos mails por contestar. Lo sé, no lo olvido; igual que no olvido todo el soporte que me habéis prestado en el concurso de recetas, aquí -clic- (por cierto, podéis seguir votando sin piedad hasta las 00'00 de esta noche; incluso si ya lo habéis hecho, según me ha dicho un pajarito... la cosa está muy reñida y hay momentos en los que hasta me veo capaz de hacerme con el ipad de mis desvelos... ¡menos mal que hoy es el último día! ;).
Os lo agradezco infinito y prometo además compensaros por ello =)
*Imágenes Marie Claire Maison
Esta casa de hoy me parece un estupendo ejemplo de ello...
Decidme,
¿Qué os parece a vosotr@s?
¿Creéis que el futuro está en revisar nuestras creencias de hoy?
Disfrutad del fin de semana... yo espero que en el mío las horas sean de lo más elásticas ;)
No me riñáis, ya sé que os debo todas las visitas del mundo y que tengo muchos mails por contestar. Lo sé, no lo olvido; igual que no olvido todo el soporte que me habéis prestado en el concurso de recetas, aquí -clic- (por cierto, podéis seguir votando sin piedad hasta las 00'00 de esta noche; incluso si ya lo habéis hecho, según me ha dicho un pajarito... la cosa está muy reñida y hay momentos en los que hasta me veo capaz de hacerme con el ipad de mis desvelos... ¡menos mal que hoy es el último día! ;).
Os lo agradezco infinito y prometo además compensaros por ello =)
Besos,
Ingrid
*Imágenes Marie Claire Maison