Recetas básicas: Bechamel ;)

¡Muy buenos días!

Imagino que con esta receta hoy no voy a sorprender a nadie... Pero como puedo prometer -y prometo- que hago (lo que para mí sin ningún atisbo de duda es) la mejor salsa bechamel del mundo; os voy a confesar mi 'trucoreceta' =)

Mi receta es heredada... bueno, quizás deberíamos matizar el contexto de esa herencia; mi abuela no soltaba prenda hasta que un día la pillé desprevenida y se la sonsaqué... ;)

La bechamel o salsa blanca (aunque la salsa blanca no se prepara con lácteos, sino que se usan fondos o caldos) es un interesante básico de cocina que nos permite terminar, camuflar y aglutinar alimentos sin piedad... =)

Con esta receta, además de los consabidos y típicos platos de pasta y verduras gratinadas, a los de casa les he colado de todo: desde unos puerros algo 'chungos' a una crêpe de champiñones, carne picada y bechamel de vino (preparada igual que esta pero sustituyendo algo menos de un cuarto del líquido por vino ;) pasando por unos filetes de pollo que necesitaban 'algo de maquillaje' y que preparé cortándolos a trozos pequeños, embadurnándolos de bechamel, rebozando luego con huevo y pan rallado y presentándolos inocentemente como unos 'nuggets' de pollo (sí J... esos 'nuggets' tan ricos, ¿te acuerdas? ;)

(Si es que la harina da mucho de sí... ¿verdad?  ;)

Los ingredientes

- Un litro de leche

- Un par de cucharadas soperas de mantequilla

- Dos cucharadas soperas de harina (claro que esto dependerá del uso que queráis darle a la salsa... evidentemente para unas croquetas esta cantidad debería aumentarse. Con estas proporciones de harina, leche y tiempo de cocción obtendréis una salsa fina pero consistente, no demasiado líquida pero tampoco excesivamente espesa... yo diría que lo he dejado clarísimo =)

- Una cebolla pequeña picada

- Nuez moscada, sal y pimienta al gusto

- Unas gotitas de coñac

¿Cómo la prepararemos?

Realmente esto no tiene ninguna dificultad... vamos a ver:

- En un cazo ponemos la mantequilla a derretir y le añadimos la cebolla picada. Dejamos dorar (yo tengo un punto quizás excesivamente maniático con el dorado de la cebolla... no paro hasta casi caramelizar... pero sé de buenos resultados con algo más que un 'pochado' ;).

- Cuando hayamos conseguido 'el dorado' de la cebolla, añadimos la leche y dejamos calentar (sin dejar que hierva; lo hago así porque he observado que con la leche a una cierta temperatura se hacen menos grumos al añadir la harina ;).

- Esperamos a que humee y le añadimos la harina, la sal, las especies y las gotas (y quien dice gotas, dice un 'chorritín'... ahí, sin miedo ;).

- Y a remover... y remover... Puede que veáis que los grumos no desaparecen o que no os queda una textura tan fina como quisierais: este es el momento de usar la batidora (y digo que este es el momento porque todavía no se ha finalizado la cocción; si lo hiciéramos al haberla terminado obtendríamos una textura demasiado fina que puede que no nos sirva para todos los platos que tengamos en mente preparar).

Y a seguir removiendo... en teoría no deberíais apartaros del cazo ni un momento (pero no digo que yo no lo haga... y gracias a ello he forjado una estrecha amistad con las 'nanas-estropajo' XD).

- El tiempo de cocción (siempre a fuego bajo) también es algo complicado de definir; básicamente porque la reducción en más o menos cuantía depende del uso que queráis darle a la salsa (y de eso dependerá el espesor) y de los días que queráis conservarla.

Personalmente me gusta que la consistencia sea algo 'potente'; yo voy probando (espero primero a que desaparezca el sabor crudo de la harina) y luego suelo dejarla todavía un poco más... hasta que la salsa 'caracolea' (ufffffffff qué complicado es esto de describir matices...).

- Rectificaremos de sal, pimienta y nuez moscada...

(Os va a quedar algo parecido a esto...)

¡Y ya la tenemos =)!

(Nota: Si al enfriarse os resulta una textura demasiado espesa; no hay problema, le dais un par de vueltas de batidora y veréis qué cambio ;)

Ahora contadme...

¿Sois, al igual que yo, 'bechameladictos' convencidos?

¿Usáis la bechamel para los platos más tradicionales... o también para descaradas operaciones de camuflaje =)?

Pasad un fin de semana estupendo, nos vemos el lunes ;)

Besos,

Ingrid

*Imágenes Pinterest, We heart it & Google